Si tienes un peque curioso en casa, seguro que te suena esta escena: estás preparando la cena y una manita (o dos) se agarra a tu pierna mientras una vocecita dice «¡yo, yo, yo!». Quieren ver, tocar y participar, pero la encimera es un mundo inalcanzable. Aquí es donde entra en juego la torre de aprendizaje, un invento genial que cambiará para siempre vuestros momentos de **cocinar con niños**. Te contamos todo lo que necesitas saber.